METODOLOGÍA AICLE

Tal y como hemos podido ver en los contenidos del presente curso, y en especial en lo que a la metodología se refiere, las tareas serán el camino para conseguir la meta, que en este caso será el aprendizaje, y por tanto, la consecución de los objetivos marcados. Todo ello se dará de manera integrada por medio del aprendizaje tanto de la lengua como de los contenidos.
Las tareas que vamos a planificar, han de estar relacionadas con los objetivos, y serán flexibles y abiertas, teniendo en cuenta las dificultades del alumnado, esto es, la diversidad de los mismos. Cuando preparamos las tareas, estas serán cercanas, realistas y motivadoras, teniendo en cuenta los intereses del alumnado y sus ideas previas acerca del tema a tratar. Realizaremos una evaluación de todo el proceso de enseñanza-aprendizaje, no sólo del resultado final.
Las tareas que vamos a diseñar han de ser de tres tipos: Tareas de recepción y Tareas de producción.
En cuanto a las Tareas de recepción, se trata de que el alumnado escuche y lea, por lo que hemos de utilizar variedad de actividades en los que el alumno/a tenga que recopilar información sobre un tema, analizándolo y comprendiéndolo. Por ello, las actividades apropiadas para ello, girarán en torno a asignar etiquetas o nombres, y distribuir contenidos. También podrán completar tablas, diagramas o mapas conceptuales. Elegirán parte del contenido de acuerdo a algún criterio dado. Tomarán notas de algunos datos concretos. Habrán de interpretar imágenes, identificar y/o reorganizar información, corregir errores ,...
En cuanto a las Tareas de producción, se trata de que el alumnado hable y escriba, por lo que dada la dificultad de las mismas, tendremos que entrenar al alumnado, apoyándoles con actividades de andamiaje, las cuáles le darán seguridad a lo largo de todo el proceso.
Por ello, las actividades que les vamos a proponer podrán girar en torno a las siguientes destrezas: Tendrán que completar huecos en textos, y terminar algunas oraciones. Tras las audiciones o lectura de textos, deberán responder a preguntas de comprensión de los mismos. Otro tipo de actividades serán las de dar respuesta a cuestionarios de opinión. Deberán buscar información, utilizando las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación. Una buena actividad puede ser una "Caza del tesoro", mediante la que tendrán que encontrar información específica sobre el tema de aprendizaje. Podrán preparar también una presentación que se realizará de manera oral.
Por último, y como resultado final, el alumnado podría preparar un mural, una maqueta, una grabación, una presentación, un documento, una exposición ,...
Como conclusión, quiero resaltar que siempre que apliquemos un proyecto AICLE, deberemos comenzar con la consecución de tareas sencillas para el alumnado, con lo que conseguiremos que no se pierdan ni se agobien, para que conforme ellos/as vayan cogiendo las destrezas necesarias, podamos proponer tareas de una mayor complejidad, pero eso sí, utilizando siempre las estrategias de andamiaje necesarias que apoyen la construcción del conocimiento.